
"El cristianismo de los primeros siglos era un cristianismo que vibraba de entusiasmo, gozo y optimismo (...). Era un cristianismo pascual, que es lo mismo que decir cristianismo alegre y triunfal".
(J. Azpitarte, Sentido pastoral del domingo -Desclée de Brouwer, Bilbao, 1966-, pág. 78)
No hay comentarios:
Publicar un comentario